Ciudad inteligente e innovadora
Tradicionalmente, se ha definido una Ciudad Inteligente (Smart City) como “aquella ciudad que usa las tecnologías de la información y las comunicaciones para hacer que tanto su infraestructura crítica, como sus componentes y servicios públicos ofrecidos sean más interactivos, eficientes y la ciudadanía pueda ser más consciente de ellos”.
En una definición más amplia, una ciudad se puede considerar como “inteligente” cuando las inversiones en capital humano y social y en infraestructura de comunicación fomentan activamente un desarrollo económico sostenible y una elevada calidad de vida, con una sabia gestión de los recursos ejercida a través de un gobierno abierto.
Un concepto en evolución
Según el EIP-SC European Innovation Partnership on Smart Cities and Communities, las Ciudades y Comunidades Inteligentes se pueden definir de la siguiente manera:
“Las Ciudades Inteligentes deben ser consideradas sistemas de personas que interactúan y usan flujos de energía, materiales, servicios y financiación para catalizar el desarrollo económico sostenible, la resiliencia, y una alta calidad de vida; estos flujos e interacciones se hacen “inteligentes” mediante el uso estratégico de infraestructuras y servicios de TICs en un proceso de planificación urbana y gestión transparentes que responda a las necesidades sociales y económicas de la sociedad”